El verano de 2017 continúa su curso de manera perturbadora: lluvias torrenciales y demás desastres naturales en diferentes partes del mundo, lanzamientos de misiles balísticos por parte de Corea del Norte y Estados Unidos de América, Israel prosigue con los hostigamientos al pueblo palestino, ejercicios militares realizados por las grandes potencias, elecciones a la asamblea constituyente en Venezuela, etc.

Además de todo esto, el próximo 21 de agosto un eclipse de sol será visible en diferentes partes del mundo. El evento podrá ser observado de costa a costa en los Estados Unidos de América y como siempre sucede al acercarse un acontecimiento de estas características, los miedos a las catástrofes y las profecías apocalípticas del fin del mundo se pueden encontrar por todas partes. De la misma manera las predicciones de todo tipo tampoco se hacen esperar.

A partir de esa fecha nos daremos cuenta qué tipo de efecto ha tenido el eclipse en la geopolítica mundial.